Reflexión | La vida me quito lo que más amaba, pero me demostró que no me hacía falta.

En un principio, en aquellos días en los que me veía perdida entre un mundo gris, que había perdido sus colores desde el día en que se fue de mi lado, pensaba que la vida me había quitado todo lo que me pertenecía en ese momento, porque en el momento en el que te alejo de mi camino, me había quitado todo; la vida me había dejado sin nada, solo con el vació que te encargaste de dejar en mi pecho y ese ardor que todas las noches llegaba sin avisar y comenzaba a producir el llanto que me hacia desesperar.

La vida me haba quitado todo lo que amaba, y en ese momento no podía comprender el por qué, no podía darme cuenta de cual era el propósito por el que la persona que amaba con todo mi corazón se estaba yendo de mi vida, una vida que haba construido a su lado. Sentía que desde ese momento mi vida dejaría de ser vida, y que lo mejor que podía hacer era rendirme al dolor, dejar que penetrará todos mis órganos y me matara con el tiempo.

El tiempo comenzó a limpiar las dudas, comenzó a contestar a cada una de ellas y me mostraba un nuevo camino que había preparado para mí, pero que el dolor, la desesperación y los sueños rotos no me permitían ver adelante de mí. Ahí estaban mis sueños, esas ideas llenas de historias increíbles que solo a tu lado podía hacer realidad; pero después de un tiempo pude darme cuenta que todas esas historia podía vivirlas sin la necesidad de estar ahí, a lado tuyo, sino que podía ver mis sueños otra vez, con la esperanza de seguir adelante sin ti. El tiempo me demostró que las heridas del corazón son capaces de sanar y que los pensamientos pueden cambiar.

Seguí a mi corazón y pude darme cuenta que ya no sentía el mismo dolor que un día sintió al verte partir. Mi corazón ahora ve la posibilidad de poder seguir sin ti y me demostró que estaba equivocada, que no me hacías falta para seguir adelante, porque en algún momento de mi vida estuve sin ti y podía ser feliz. Ahora sigo mi camino y sé que no me cansaré, sé que puedo construir miles de historias, sola, porque soy capaz de ser feliz sin depender de nadie más, al contrario, que todo lo que puedo lograr con mis propias manos; no dependo de nadie más, solo de mis fuerzas y ganas de seguir adelante. Tengo metas que cumplir, tengo camino que recorrer para lograr ser mejor cada día, a pesar de que tú no estés aquí. Todo lo que estoy logrando desde el día que te fuiste, es mi recompensa por haberte dejado a pesar de amarte con todo mi corazón, es gracias al esfuerzo de ser fuerte para olvidar lo que un día viví a tu lado. Fuiste el amor de mi vida, lo que yo más amaba, pero ahora que no te tengo sé que puedo ser feliz.

Escrito: Vane
Voz: Sergio Melchor
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